Apostolado

Paso de Misterio de la Sagrada Cena (1995-2005)
El Misterio de la Sagrada Cena de Cáceres es obra del imaginero Sevillano Antonio Joaquín Dubé de Luque. Comenzó a construirse en el año 1994, siendo la bendición y la primera procesión del Señor de la Eucaristía en el año 1995. A partir de esa Semana Santa, llegaron a Cáceres las imágenes del apostolado hasta completarse el paso de Misterio en 2005. Ya en 2009, se da por finalizado el paso en lo que a imaginería se refiere con la incorporación del Cordero Pascual.

Se trata sin duda de la obra culmen del Escultor e Imaginero Sevillano. Para la ciudad de Cáceres, es un conjunto monumental hecho por y para la ciudad más monumental del España, una joya que desfila alegre entre el tercer conjunto histórico artístico más importante de Europa. En el año 1994, pocos hubieran podido imaginar que la Semana Santa de Cáceres pudiera dotarse de semejante obra escultórica en tan poco tiempo. De igual modo, resultaba una ilusión inalcanzable pensar que un paso de más de tres mil kilos pudiera desfilar en la Semana Santa de nuestra ciudad portado nada más y nada menos que por 100 hombres y mujeres.

A continuación, pueden detenerse en la expresividad que derrama cada una de las imágenes del paso de la Cofradía Sacramental. Siendo todas ellas de una calidad tremenda, destacan sobremanera la figuras de San Judas Iscariote, San Judas Tadeo, San Juan Evangelista y San Andrés. Por su parte, encierra grandes secretos la postura de San Simón y de San Pedro. Prácticamente todas las imágenes que componen el conjunto, podrían reconocerse por sus nombres por cualquier conocedor de los rasgos que se les han atribuido históricamente. No obstante, se ha embellecido y dotado de una inspiración al conjunto que refleja la incertidumbre e incluso el temor en esos momentos.

La serenidad del Señor de la Eucaristía bajo la tensión que inspira todo el apostolado sobre el paso, esconde el poderío y el respeto que infunde la imagen del Señor en la cercanía, siendo una imagen sin parangón. Consagra como ninguna otra, la sencillez y la grandeza que encierra dentro de sí el misterio de la Eucaristía.

En definitiva, este misterio merecía detenerse en él para conocer todos los secretos que esconden las miradas, las posturas y las expresividades de cada uno de los apóstoles en torno al Señor. Probablemente estemos ante uno de los pasos más importantes de la Imaginería Pasionista Neobarroca Sevillana. No obstante, dentro de la espectacularidad del conjunto, el autor ha sido capaz de encarnar en él ciertos rasgos de la humildad y la sencillez cacereñas.

Judas Iscariote (2005)

Judas Iscariote (2005)
San Andrés (2000)

San Andrés (2000)

San Andrés (2000)

San Andrés (2000)

San Andrés (2000)

San Bartolomé (1998)

San Bartolomé (1998)

San Bartolomé (1998)

San Felipe (1998)

San Felipe (1998)

San Felipe (1998)

San Felipe (1998)

San Juan Evangelista (1995)

San Juan Evangelista (1995)

San Juan Evangelista (1995)

San Juan Evangelista (1995)

San Judas Tadeo (1995)

San Judas Tadeo (1995)

San Judas Tadeo (1995)

San Judas Tadeo (1995)

San Mateo (1999)

San Mateo (1999)

San Mateo (1999)

San Pedro (1997)

San Pedro (1997)

San Simón (2002)

San Simón (2002)

Santiago (1996)

Santiago (1996)

Santiago (1996)

Santiago el Menor (2001)

Santiago el Menor (2001)

Santiago el Menor (2001)

Santiago el Menor (2001)

Santiago el Menor (2001)

Santiago el Menor (2001)

Santo Tomás (2003)

Santo Tomás (2003)

Santo Tomás (2003)


Cordero Místico (2009)
Cordero Místico (2009)

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